A estas alturas, deberías sentirte confortable tanto contribuyendo a un proyecto, como manteniendo tu propio proyecto o integrando contribuciones de otras personas. ¡Felicidades por haberte convertido en un desarrollador Git productivo!. En el capítulo siguiente, aprenderás el uso de más herramientas avanzadas y algunos trucos para tratar con situaciones complejas; haciendo de tí un verdadero maestro Git.